La Diócesis de Málaga publica en julio una entrevista con el Prior General de los Carmelitas para resaltar la devoción a la Virgen del Carmen
El número de julio de la revista de la Diócesis de Málaga (España) se ha centrado en la Virgen del Carmen. Al ser el 16 de julio el día de su fiesta, varios de los artículos se centraron en la devoción de la gente y en cómo celebran la fiesta que marca el calendario cristiano de verano. La portada de la revista mostraba la imagen de la Virgen del Carmen, patrona de Marbella.
Un artículo presentaba una entrevista al prior general carmelita, P. Míċeál O'Neill reflexionando sobre la actualidad de la advocación mariana que "nos une a su Hijo Jesús, nos une a la Iglesia y nos une al cielo." El P. Míċeál estuvo antes en Málaga para participar en la clausura del Jubileo del centenario del nacimiento en Málaga de la Congregación Carmelita del Sagrado Corazón de Jesús de Málaga.
Hablando del significado de la celebración del aniversario, el P. Míċeál dijo: "Hoy reconocemos que un carisma es un don del Espíritu Santo. La familia vive de un carisma que tenemos en común, junto con una variedad de carismas que surgen en los distintos sectores de la familia: hermanos y hermanas de vida apostólica, monjas, frailes y laicos. Poder reconocer y celebrar esta riqueza es siempre un motivo de gratitud y también un impulso para seguir respondiendo día a día a la vocación que hemos recibido y a la misión que nos espera".
En los días previos a la festividad de la Virgen del Carmen, el prior general reflexionó sobre una de las devociones marianas más queridas en toda la Diócesis de Málaga. Calificó la popularidad de la Virgen del Carmen como "un regalo para la Iglesia".
"Más de 800 años [después de nuestra fundación], la Orden Carmelita sigue llevando esta agua de vida a los lugares donde está presente. Nuestra familia es una familia mariana y también una familia de Elías", afirma el prior general. "Con estos dos grandes modelos vivimos como personas que tienen una experiencia muy profunda de Dios, como María y Elías. Con este espíritu nos acercamos a Dios, revelado en Jesucristo, junto a todas las personas que han encontrado en su vida la importancia de la búsqueda de Dios. Queremos acompañar esta búsqueda con el amor y la sabiduría que nos da nuestra vocación y nuestra formación en la Iglesia. Queremos hacer presente en el mundo que la dignidad de la persona humana se encuentra, en primer lugar, en su ser creada por Dios a su imagen y semejanza; y en su capacidad de vivir una profunda amistad con Dios, en la persona de Jesús, a ejemplo de María. El Carmelo vive de la Palabra de Dios y ayuda a quienes entran en contacto con él a conocer y cultivar esa palabra de salvación en sus vidas".
El padre O'Neill tiene un profundo conocimiento de la devoción a la Virgen del Carmen. "He podido familiarizarme con ella tanto aquí en España como en Latinoamérica, y es un verdadero regalo que el Señor ha hecho a la Iglesia. La Virgen del Carmen es una devoción y un camino para muchas personas. No es ni puede ser "campanilismo" (competencia, rivalidad) de ningún tipo. La Virgen del Carmen no es la "campeona de las Vírgenes".
"Es la Virgen del Carmen la que nos une a nuestra tradición desde el principio, nos une a su Hijo Jesús, nos une a la Iglesia y nos une al cielo".
Respecto a la popularidad de los nombres Carmen o María del Carmen, que año tras año encabezan las listas de los nombres españoles más populares, el padre O'Neill afirma sentirse "bien con las personas que se llaman María del Carmen, tanto por parte de María como por parte de la Virgen del Carmen. El nombre habla de bondad y belleza. Me resulta difícil pensar que una persona que lleve este nombre pueda ser otra cosa que buena y cristiana. Por la bondad y belleza de María, la Virgen del Carmen este nombre cala hondo en muchos lugares y culturas. El mayor reto hoy es que el Evangelio penetre con su bondad, verdad y belleza en los pueblos y culturas de hoy.